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Ayer te esforzaste mucho durante tu ejercicio. Parecía que podías con todo y diste el 100% de ti. Hoy estás completamente agotado y exhausto, te duele todo y sientes agujetas por todo el cuerpo. Sientes esa molestia muscular que te recuerda que igual deberías hacer deporte más a menudo...
A todos nos ha pasado. Pero, ¿por qué aparecen realmente las agujetas?
Llamamos agujetas a la Mialgia diferida, un término menos conocido pero que al fin de cuentas viene a significar lo mismo. Así pues, se trata de un tipo de dolor localizado en los músculos de nuestro cuerpo, que viene provocado por un esfuerzo no habitual para nosotros.
Esto normalmente ocurre por una falta de entrenamiento, ya que si no acostumbramos a realizar ejercicio, tendremos un desacostumbramiento muscular. También suele aparecer por someter al cuerpo a un ejercicio de mayor intensidad. Así que no hace falta tener una vida sedentaria para sufrir este tipo de pinchazos intramusculares.
Sin embargo, hay otra causa que provoca las agujetas y que muchos desconocen. Y es que la Mialgia diferida puede producirse como consecuencia de una lesión, al disponer de una debilidad muscular. ¿Lo sabías?
Así pues, las agujetas consisten en una serie de microroturas en las fibras de nuestros músculos. Las fibras menos preparadas para asumir el esfuerzo físico serán más propensas a romperse, por lo que son las generarán este tipo de molestia.
En NovaSalut sabemos lo molesto que puede llegar a resultar tener agujetas, ya que a veces tardan más de lo que pensamos en desaparecer. A continuación os damos algunas pautas que estamos seguros que, si las lleváis a cabo, os darán buenos resultados para prevenir esta molestia:
No empieces a practicar una actividad deportiva sin haber dedicado al menos 5 minutos a calentar tu cuerpo para el movimiento, al igual que debes dedicar 5 minutos a estirar al terminar. Debéis saber que la mayoría de las lesiones en el deporte ocurren al comenzar la práctica y que, con un buen estiramiento final, estarás previniendo la aparición e intensidad de las agujetas.
Sí, la hidratación es otro factor a tener en cuenta. Aunque no te encuentres sediento, es recomendable mantenerse hidratado durante la práctica deportiva. Esto ayudará también a tus músculos.
No pretendas pasar de 0 a 100 en 2 días. Es aconsejable empezar con poco volumen de esfuerzo e ir incrementando poco a poco. Esto se adapta a cualquier tipo de deportista o individuo, ya que todos tenemos un nivel de intensidad o resistencia que queremos ir aumentando.
Seguro que has visto a algún deportista de élite sacudir su cuerpo durante la actividad deportiva. Te desvelamos su razón: haciendo esto estás favoreciendo la circulación sanguínea, por lo que preparas a tus músculos para soportar los esfuerzos a los que los vas a someter.
Practica deporte a la intensidad que esté a tu alcance. No te pases y escucha a tu cuerpo, ya que los cambios muy bruscos de ritmo no son recomendables. Además, como siempre defendemos, llevar una alimentación sana y equilibrada es fundamental. En el ámbito deportivo, comer adecuadamente antes y tras el ejercicio es fundamental para poder rellenar los depósitos musculares y alimentar nuestro organismo.
Puedes tener en cuenta todos aquellos alimentos que sean ricos en ácido láctico y proteínas, como los lácteos, pescados o carnes, ya que ayudan a la recuperación de todas aquellas fibras rotas.
Es importante saber diferenciar entre agujetas y lesiones. De esta forma, si estás practicando algún tipo de deporte y en ese mismo momento, un ejercicio determinado te produce dolor, lo más posible es que se trate de una lesión. De otra manera, si el dolor aparece tras realizar la actividad física, seguramente sean agujetas.
En ese sentido, con una pauta de entrenamiento suave, verás como la agujeta desaparece. Sin embargo, si se tratara de una lesión muscular o tirón, a pesar de realizar ejercicios de poca intensidad, la zona te seguirá doliendo.
En el caso de que ya tengas agujetas, no pienses que un vaso de agua con azúcar (como muchos piensan) solucionará algo. Así, si ya sufres de estos tipos de dolores musculares, te proponemos lo siguiente para aliviarlo:
Incluso puede ser con cubitos. Pero solo es apto para los más valientes. El efecto que produce el frío en la zona afectada de nuestros músculos es antiinflamatorio.
Consiste en realizar un masaje que ayude al retorno sanguíneo de todo nuestro organismo. Esto hará que podamos deshacernos de todo aquello que nuestro cuerpo no necesita y lo relajará, aliviando el dolor muscular.
Hay profesionales que se dedican a aliviar el dolor de este tipo de microlesiones haciendo que su recuperación sea más temprana. Estos expertos te mostraran diferentes alternativas: terapias con ultrasonidos, estimulaciones eléctricas o ejercicios físicos que ayudarán al músculo afectado.
Las agujetas son un signo positivo siempre y cuando no derive en algún tipo de lesión. Recordad que los estiramientos antes y después del trabajo físico son necesarios para cualquier tipo de deporte, ya que estaremos relajando las fibras musculares para prevenir posibles inconvenientes futuros.
Hay que entender que nuestro cuerpo necesita un tiempo para recuperarse del esfuerzo y volver con más fuerza. Aumenta poco a poco la intensidad de los ejercicios que realices. Es mejor empezar a entrenar de menos a más, solo así verás mejoras y conseguirás superarte día a día.
Si tus agujetas no desaparecen o son demasiado fuertes, acude a un fisioterapeuta que pueda darte el tratamiento adecuado para aplicar en este caso. Hay masajes o estimulaciones que te aliviarán el dolor producido por estas microroturas.
